Saltar al contenido 
El pañuelo se ha revelado como un complemento esencial en el armario masculino, capaz de añadir un toque distintivo y de estilo a cualquier atuendo. Sin embargo, muchos hombres se enfrentan a la incertidumbre de cómo acomodar correctamente esta pieza para sacarle el máximo partido. En este artículo, se abordarán tres recomendaciones fundamentales para posicionar el pañuelo en el bolsillo del saco, adaptándose tanto a contextos formales como a aquellos más relajados y creativos. Descubriremos cómo a través de sencillos pasos, este accesorio puede transformar la indumentaria masculina, aportando elegancia y personalidad.
Contenido:
Pañuelo con estructura para ocasiones formales
Elegir el material adecuado
Para eventos que exijan un protocolo estrictamente formal, es preferible seleccionar pañuelos de algodón y evitar aquellos de lino o seda, ya que estos últimos tienden a perder la forma deseada. Buscar un diseño que incorpore una raya discreta puede sumar un detalle de distinción sin restar sobriedad.
Doblar el pañuelo correctamente
El pañuelo debe presentar un aspecto recto y pulcro. Para ello, se dobla en cuatro partes iguales hasta formar un pequeño cuadrado, conocido como pocket square. Este se ajusta al ancho del bolsillo del saco para evitar arrugas indeseadas y lograr un efecto visual perfectamente alineado.
Pañuelo desestructurado para un toque festivo
Técnicas de acomodo informal
Los pañuelos de seda, con diseños más atrevidos y coloridos, como los de la marca Pineda Covalín, son ideales para configuraciones menos formales. Al no requerir una doblez particular, la meta es conseguir una apariencia casual y desenfadada que aporte un aire festivo al conjunto.
Maniobra para colocar el pañuelo
Para colocar este tipo de pañuelo, se puede usar la palma de la mano o una superficie plana. Se toma del centro y se levanta, permitiendo que las esquinas caigan naturalmente. A continuación, se ajusta el exceso de tela hacia adentro y se acomoda en el bolsillo hasta obtener el efecto deseado.
Pañuelo semi-estructurado con detalles de color
Realzar con bordes coloridos
Un pañuelo con bordes de un color que contraste puede ser sumamente atractivo. Esta característica se explota al máximo con una técnica de acomodo que permite que los bordes sean visibles, generando un juego de colores interesante con otros elementos del atuendo, como las agujetas o la camisa.
Proceso inverso para un acomodo óptimo
Similar a la técnica para pañuelos desestructurados, pero en este caso, se toma el pañuelo por el centro y luego se invierte el proceso, de forma que el pañuelo exhiba ondulaciones y quede más prominente en el bolsillo, aprovechando el diseño del borde para un efecto visual más dinámico.
Consejos finales para combinar el pañuelo
Es crucial evitar combinar el pañuelo con el color exacto de la corbata, ya que una correspondencia directa puede resultar excesiva. Se busca, en cambio, que el pañuelo haga contraste y sume interés al conjunto. Así, con estas tres formas distintas de posicionar el pañuelo, se pueden cubrir una amplia gama de eventos, desde los más formales a los casualmente elegantes, garantizando siempre el mejor aspecto.